lunes, 28 de octubre de 2013

Inadecuado acceso a la energía en el municipio de Nuquí - Chocó (primera parte)

POR: Cinthya López, Catalina Medina, Johana Salazar


El municipio de Nuquí se localiza en el departamento del Chocó al occidente de Colombia, entre la serranía del Baudó y el océano Pacífico. Su población está conformada por comunidades afro colombianas, pueblos Indígenas y un amplio grupo de población mestiza. Es reconocido como una zona de gran diversidad cultural y ecosistémica; tiene una temperatura promedio que oscila entre los 28 y 30 grados centígrados; cuenta con 8. 096 habitantes, de los cuales 3.095 corresponden a la cabecera municipal; en la zona urbana hay 2679 y 1592 pobladores pertenecientes a comunidades indígenas (Alcaldía Nuquí, 2013). Este municipio limita al norte con el municipio de Bahía Solano, al sur con el municipio del Bajo Baudó, al oriente con el Alto Baudó y al occidente con el Océano Pacifico.  La cabecera municipal se encuentra ubicada a orillas del mar pacifico. Posee una extensión de 958 kilómetros cuadrados y se encuentra a una altura de 5 msnm. Cuenta con 7 corregimientos: Arusí, Coquí, Joví, Jurubirá, Panguí, Termales y Tribugá (Alcaldía de Nuquí, 2013)

Nuquí es un municipio rico en fuentes hídricas; los efluentes más importantes son el rio Asurí, Coquí, Panguí, Chori, Jovi, Tribugá y Jurubira, todos pertenecientes al área rural; y en el casco urbano los ríos Nuquí y Ancachí. Las actividades económicas principales son las agricultura, la pesca y las artesanías (Alcaldía Nuquí, 2013).

El municipio posee un inadecuado acceso al servicio de energía eléctrica debido a que no se presta al total de la población las 24 horas del día.  Los corregimientos del municipio donde se encuentra el foco de la problemática son Arusí, Partadó y Termales, así como la comunidad El Yucal (IPSE, 2013). Actualmente estas poblaciones cuentan con servicio de energía 6 horas al día a través de plantas diésel, donde se gastan aproximadamente 4.500 galones de ACPM al mes que  cuestan 43 millones de pesos, un costo altísimo, sin tener en cuenta el transporte y el mantenimiento, y son operadas por Electronuquí (Gutiérrez, 2013). 

Las consecuencias de un servicio intermitente o en ocasiones nulo, genera que la población sea la más afectada, pues la percepción de inseguridad aumenta, en los hogares y negocios los alimentos que necesitan de refrigeración se descomponen, y las actividades propias de una casa se ven alteradas, en general, la calidad de vida de toda la población es impactada; paralelo a esto, el desarrollo y economía no progresan, no hay dinamismo debido, precisamente, a la falta de un buen servicio eléctrico (Rivera). La carencia del servicio ha llevado a los habitantes a protestar y exigir una mejora para que puedan tener electricidad, si no es de manera permanente, por lo menos una parte del día, lo cual solo ha quedado en palabras por parte de los gobernantes (Rivera).

Cabe destacar que la empresa encargada de la prestación de este servicio público ELECTRONUQUÌ, no se encuentra interconectada en esta zona, tiene la posibilidad de recursos del subsidio de energía lo que conlleva a la compra y suministro de combustible para las plantas del municipio que funcionan por medio de juntas encargadas de operar. (Sucre.E.2012)

Sin embargo como ya se ha mencionado, el bajo abastecimiento de combustible, por limitaciones económicas, por retrasos en giros de recursos por parte del IPSE (Instituto para la Economía Social), la inestabilidad en el transporte del combustible, al ser traído desde el puerto de buenaventura, conlleva a la escasez del mismo y, por consiguiente, a la limitación de la energía además de daños en las plantas producto de falta de mantenimiento o deterioro ya que su ciclo de vida varia y cada vez más se limita su prestación a solo el 65,5% de la población lo que resalta que el 100% de la comunidad depende solamente de plantas de Diesel (Sucre. E. 2012).

Para concluir, el gobierno a través del IPSE está bastante tranquilo ante esta problemática viendo prácticamente un abandono en alto grado de entidades de control que ayudarían a mantener por lo menos el estado productivo de dichas plantas que aportaría al mejoramiento de la calidad de vida de la población vulnerable ante esta situación; además el municipio cuenta con un plan de desarrollo sustentable que es viable para el mejoramiento de los otros servicios públicos ya que cada uno tiene sus falencias y la población se ve cada vez más perjudicada presentando diversos problemas y el aumento de quejas, protestas y manifestaciones de inconformidad con justas razones que pueden tener solución.

REFERENCIAS CITADAS

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